jueves, 28 de noviembre de 2013

Que absurdo es odiarnos.

Despierto pensando que te has ido, que ya has desaparecido de mi vida, que no volveras. Pero en cada esquina te veo, cada día te recuerdo. Y sigues doliendo, sigues haciéndome sufrir. Todavía eres la razón de mis lágrimas y mi peor pesadilla.
Corazón que no ve, corazón que no siente. Que tontería más grande. ¿Entonces porque te sigo sintiendo como si estuvieras aquí? ¿Porque me siguen doliendo tus abrazos? ¿Por qué te sigo queriendo?
A veces quiero rendirme. ¿Para que seguir con esto si te sigo queriendo? Total, solo consigo extrañarte aún más. Pero me lo he prometido. Y lo conseguiré, empezaré de cero, contigo o sin ti.
"He encontrado tu sonrisa dulce que brilla en esta nieve como un millón de luces... Y recordé que todo este coraje no es nieve, no va a derretirse aunque debiese... Un gesto simple pero tan profundo... "

No hay comentarios:

Publicar un comentario